A divertirse [19 de Septiembre]

Estuvo atenta a los besos, el primero con tensión acumulada (lo sabía ¡Ja!), el segundo con golpes incluidos (nada fuera de lo común con ese par), el tercero, bueno siempre le agradaba ver a su primo en otras situaciones que no tuvieran que ver con el estudio, el cuarto no estuvo mal y el último fue ligero ciertamente.

Estaba ahí, atenta al giro de la botella cuando salió Tom, justo se preguntaba quien sería la chica cuando se percató que dicha botella la señalaba. 

El pokeo hizo que arrugara el ceño ligeramente, más que nada por la sorpresa, pero no le molestó realmente, así que no tardó en verlo a los ojos.

-Labios - respondió sin pensarlo realmente, un beso en el cuello no gracias.

Tom finalmente sonrió al oír la respuesta de Antía.

La mano que había usado para pokearle la nariz, la usó esta vez para sostener el rostro de la rubia por el mentón. Se acercó lentamente hacia ella y la beso en los labios, como ella había pedido. Fue un beso bien dado, tranquilo y de duración normal (?). Sin embargo, antes de separar por completo su rostro del de Antía, le mordió suavemente el labio inferior y le guiñó un ojo.

Se incorporó para volver a su lugar, con un ligero brillo de diversión en sus ojos.

Lo dejó actuar sin oponer resistencia, era un simple juego después de todo, el chico no iba a propasarse con tanta gente alrededor, eso creía. Efectivamente así fue.

El beso en si no estuvo mal, no la hacía estremecerse pero tampoco le desagradaba, sin embargo la última acción la tomó por sorpresa. Con la yema de sus dedos tocó sus propios labios ¿La había mordido? bueno, al menos ya sabía que se sentía.

En eso recordó a su primo junto a ella, no debía estar contento. Lo miró de reojo y comprobó que efectivamente, no lo estaba. Tenía la misma cara de poker que siempre pero lo conocía lo suficiente para identificar cuando algo lo molestaba, así que nadie más se daría cuenta, salvo Oda, quien sonreía y ponía una mano en el hombro de Alex.

Sonrió antes de colocar una mano sobre la de su primo, antes de regresar sus ojos a la botella que giraba.

No perdió detalle de los siguientes besos,  no estuvieron mal, sobretodo el segundo con mordida incluia pero creía que el juego podía ser más divertido con las combinaciones y reacciones correctas. Así que esperaba que esta vez surgiera una pareja interesante. 

La botella giró nuevamente, deteniéndose en Kevin.

- Veamos quien es la afortunada, Kev-Kev -le dijo sonriente antes de repetir la acción - Oh -dijo manteniendo su expresión mientras veía a Cathy.

- ¿Eh? -fue lo único que atinó a decir. Vio la botella, a Kevin, a Rose, botella, Kevin, Rose, hasta que se sonrojó. Y se quedó ahí esperando nerviosa.

- Se suave - Rose le susurró a Kevin, de tal forma que sólo él la escuchara. Tal vez así su amiga se calmaría.

"Kevin suertudo..." Pensó Tony en lo que veía la última pareja que la botella había formado, manteniendo la sonrisa tranquila en su rostro.

Mírenla, tan linda y sonrojada, y no era por él. Con algo de suerte tal vez y la botella se volvía mágica otra vez y le daba la oportunidad de besar a Cathy.

Por suerte, no le había tocado en ningún momento el turno en lo que iba el juego de la botella. Sin embargo, no podía negar que estaba teniendo un rato animado gracias a las expresiones, respuestas y las acciones de sus compañeros. El juego no era nada difícil y se la estaban llevando calmado.. Al menos hasta el momento.

Eso la tenía calmada y alegre... a ver quienes serían los siguientes participantes.

Finalmente le había tocado a él divertirse (?). Vio a la botella girar para ver quién sería su compañera, y se sorprendió al ver que sería Cathy, la amiga de Rose. Escuchó las palabras de esta última y sintió un poco de pena por la chica, ya que se la veía demasiado nerviosa... Seguro rose la habría obligado a jugar contra su voluntad.

Así no era divertido. No le gustaba aprovecharse de las chicas, siempre prefería hacer las cosas con consentimiento (?).

Se acercó tranquilo a Cathy y le preguntó con una sonrisa dulce, mientras la despeinaba con cariño. A ver si se relajaba un poco.

- ¿Dónde lo quieres? 

Veía al chico acercarse, procurando ignorar que en ese momento era el centro de atención. ¿Y si Kevin creía que besaba mal? ¿Y si tenía mal aliento en ese momento? Bueno, igual no importaba, no pretendía que el beso fuera profundo en primer lugar. ¿Si hacía alguna torpeza?

Sintió la mano del chico, y se fijó en su sonrisa. Eso era amable de su parte. Miró a Rose quien el sonreía. Respiró hondo antes de mirar de nuevo al moreno, sonriendo tímidamente.

- Los labios por favor.

...

¿Por qué había dicho por favor?

Kevin rió internamente al oír el "por favor". Seguro era producto de los nervios, y no de sus sex-apeal (????)

Le dio un beso cortito en los labios, mientras le acariciaba la mejilla con el dorso de su dedo índice, y volvió a sonreírle. De verdad no quería molestarla.

Volvió hacia su lugar y desde allí le guiñó un ojo para que se quedara tranquila. Tomó la botella y la giró dos veces. La pareja elegida esta vez eran Hana y Oda.

Agradecía haber podido calmarle a Oli las ansias asesinas, no quería quedarse sin primo por demasiada efusividad causada por el amor. Además, con la chica tranquila, él podía seguir prestando atención al juego. Riendo o no dependiendo de la pareja.

Cuando vio que la botella lo apuntaba simplemente sonrió, se levantó, caminó hacia Hana y se hincó frente a ella apoyado en una rodilla.

- ¿Dónde lo quieres, linda? -le preguntó con una sonrisa tranquila.

Vale, el beso entre Cathy y Kevin no había sido profundo ni largo, eso sirvió para calmar a Tony y permitir que se sintiese tranquilo de nuevo, por lo que su sonrisa volvía a ser sincera.

Por su parte, Hana se sorprendió y a la vez avergonzó un poco cuando la botella la señaló. Al volverla a girar honestamente estaba deseando que apuntara a Daron, pero la dichosa botella apuntó un poco más a la derecha de lo deseado. Suspiró disimuladamente y a continuación le sonrió tímidamente a Oda, al menos el chico también era atractivo.

-Hum... C-cuello- Le dice desviando tímidamente la mirada mientras se sonrojaba otro poco. Para Hana un beso en los labios era demasiado especial como para otorgarlo a cualquiera, así que no le importaba realmente recibir el gesto en el cuello. Sin perder mucho más tiempo, inclinó levemente la cabeza mientras se retiraba un poco el cabello para dejarle a Oda el trabajo más fácil.

La miró curioso. ¿En serio había pedido en el cuello? Vaya, con lo tímida que se veía, al final no se debía juzgar un libro por su portada al parecer. Le hubiera preguntado si estaba segura pero la acción de la chica se lo dejó claro. 

Si ella lo quería así, él no era quien para contradecirla, eran las reglas después de todo. Sin perder más tiempo se inclinó depositándole un suave beso en la zona. Sonrió y regresó a su lugar.

Kevin miró con sincera curiosidad a Hana. Vaya... era la primera que había pedido beso en esa zona. En fin, cada uno con sus gustos.

Volvió a girar la botella una vez que Oda hubiera vuelto a su lugar.

La primer vuelta dio como resultado a Jazz, y la segunda terminó a puntando a Daron. Esto podía ser interesante, ya que ambos eran unos chicos bastante peculiares...

Se estremeció un poco ante el beso, pero no le había parecido nada de otro mundo. Cuando salía con Tony él le había dedicado el mismo gesto varias veces, así que no veía nada extraño ni inusual, por lo que le había confundido un poco ver la sorpresa en el rostro de Oda. Será que el gesto era más atrevido de lo que ella pensaba?

Estaba a punto de sonrojarse aún más hasta que sintió la mano de Tony posarse en su cabeza, así que volteó a verle y le halló con una sonrisa sincera y calmada en el rostro, cosa que sirvió para tranquilizarla y hacer que ella también sonriera. Entre ellos dos se entendían. Lamentablemente aquella sonrisa no duró mucho cuando la japonesa vio a Daron ser emparejado con alguien más, con Jazz nada más y nada menos... Tuvo que contenerse para no poner una expresión desanimada o triste en su rostro.

La botella tardaba en apuntarla ¿cómo iba a divertirse entonces?, no es que fuera malo sólo ver a las distintas parejas, pero varios besos habían sido tranquilos para su gusto. 

Estaba pensando si ponerse a dibujar cuando por fin llegó su turno, sonriendo perturbadoramente cuando vio al afortunado, o tal vez no tanto.

Daron por su parte sintió un escalofrío, de todas las chicas le tocaba la creepy, que suerte en serio, claro, era guapa pero eso no quitaba que diera mala espina. Resignado (porque no pensaba huir), se acercó a ella y justo cuando iba a preguntarle, sintió como le rodeaban el cuello y le robaban un beso con descaro.

Jazz no había perdido tiempo y para hacer el juego más entretenido les iba a presentar un buen beso, con abrazo incluido. Invadió los labios contrarios sin pudor alguno y de manera intensa.

El rubio se quedó tieso, sin saber como reaccionar. Sí, la chica besaba bien no iba a negarlo, no la pasaba precisamente mal pero eso no le quitaba lo creepy a su compañera, ni a él su torpeza para tratar con el sexo opuesto sin problema.

Jazz se separó, no sin antes darle una lamidita en los labios al muchacho, quien sólo atinó a sonrojarse levemente y a irse a su lugar. Lo vio con una sonrisa mientras se acomodaba en su lugar.

Eerin cruzó miradas y sonrisas con su hermano, al ver el beso que se estaba llevando a cabo frente a sus narices. Al fin algo digno de ver.

Pobre Daron, era conocida su incomodidad frente a las mujeres, aunque no sabían la razón.. ¿Alguna novia psicópata en el pasado? Si era así, el trauma seguro que había empeorado...

Por su parte, Tom miraba con curiosidad a Jazz. La chica era la primera que se había atrevido a hacer algo interesante. Eso le agradaba. Con suerte, alguien más la imitaba, aunque claro... Las chicas lo tenían permitido, pero seguro que si un chico hacía algo similar, se iría directo a la enfermería.

Vale, con ese beso la sorpresa había sido doble. Por un lado estaba Hana, quien a penas y podía creer la escena y la cual sintió un leve vacío en el pecho, y por otro lado estaba Damon, quien regresaba junto con Angie ya con las toallas en la mano, y que había podido ver ese último beso que lo dejó con la boca semi abierta... Qué acaso Jazz no era la chica que había besado a su primo en más de una ocasión? Se preguntaba qué reacción tendría Voltaire cuando se lo dijera. No es que entre ellos hubiese ya algo especial o algún tipo de reacción, pero... Al parecer el primer beso de su primo había venido de parte de una chica que no tenía problemas en dedicar ese gesto.

Ambos se quedaron plantados en su sitio, cada uno sin saber qué pensar exactamente, pero un poco dolidos estaban, para ser honestos.

Los ojos de Kevin brillaban como diamantes (???), ¡Esa era la clase de cosas que valía la pena ver! Le sonrió divertido a Jazz, y en su mirada estaban prácticamente escritas las palabras "felicitaciones y gracias por divertirme"(?).

Volvió a tomar la botella en sus manos.

- Vamos a ver si seguimos viendo cosas interesantes... - Dijo divertido antes de girarla, y ver que se detenía nuevamente en Alex. Le sonrió al muchacho y volvió a girar la botella, que esta vez se detuvo en Alice.

Dos chicos tranquilos y algo tímidos... Bueno, no esperaba nada grandioso, pero uno nunca sabía. Se dice que las tímidas son las peores.

El "wow" de su prima y el silbido de admiración de Oda no le pasaron desapercibidos.

Al parecer el beso había agradado a varios, sobretodo a los que deseaban algo más intenso en el juego. Alex sólo se limitó a ver como dejaban desconcertado a su amigo, quien pronto estuvo en su lugar.

-Matador -un alegre Oda le había dado un codazo juguetón a Daron.

- Nuestro Daroncito está creciendo -comentó Travis conmovido.

- ¡Cállense tarados! -les respondió el chico mientras Alex no pudo evitar sonreír un poco.

- Vaya, el rubiecito resultó un conquistador -comentó Victoria de imprevisto, sonriendo, estaba recuperada de su beso y se unía al trolleo en ese momento.

- ¡Nadie te habló Blackshield! -no tardó en contestarle el rubio.

Ignoró a su grupo para pasear su vista por los demás, la sonrisa divertida de Rose era más que evidente y parecía felicitar a Jazz con la mirada, mientras esta última se veía satisfecha con las reacciones logradas.

En eso estaba cuando sintió un codazo, cortesía de su prima quien le señalaba la botella con un gesto de cabeza.

¿Otra vez? En fin, se levantó hasta quedar frente a Alice para después agacharse.

- ¿Dónde? -le preguntó sonando más severo de lo que pretendía.

Satisfecha era una palabra que la definía en ese momento, las reacciones contrarias la hacían sonreír , especialmente a los organizadores del juego quienes le agradecían con la mirada. Esperaba que lo ocurrido motivara a otros a que el evento fuera más entretenido.

Aunque tal vez tardaría, era el turno del chico serio (de nuevo), y su compañera de cuarto, la tímida y asustadiza Alice (al menos se mostraba así con sus historias). Sin embargo la chica parecía querer huir en ese momento, por eso no tardó tiempo en detenerla con firmeza.

- No puedes irte -le susurró creepymente al oído- Recuerda, podría pasar algo feo. Quédate aquí y contesta la pregunta, sería grosero no hacerlo.

La advertencia y mirada de su compañera de cuarto le hizo sentir escalofríos. Muy probablemente su compañera solo bromeaba con lo de la maldición... no es que ella fuera tan malvada para hacer eso... aunque recordando los momentos que había convivido con ella en el cuarto, mejor se quedaba.

Se acercó donde Alexander con miedo y con pasitos lentos. 

- No vayas a lastimarme - comentó como si se tratase de un vago con malas intenciones (?). Se puso de puntitas para poder quedar a buena altura y darle un beso ligero en los labios. Y regresar huyendo hacia su lugar.... Ya no quería jugar.

¿Había escapado de él? Sí, lo hizo y muy obvio. Ya sabía que a veces sonaba más severo de lo que pretendía pero hasta el momento no había causado tal reacción, rechazo sí, pero ¿miedo a ese grado? y conste que no le dedicó la "mirada basilisca marca Stoker"

Se levantó dispuesto a irse a su lugar, por un lado estaba bien, no tenía que besar de nuevo, pero pronto se dio cuenta que la chica regresaba a paso de tortuga. Por lo que esperó a que llegara frente a él.

- No voy a... -fue interrumpido por el beso. ¿No era la segunda vez que le robaban un beso? ¿Cómo debería tomarlo?

Después lo pensaría, así que se fue a sentar a su lugar.

Kevin observó a Alice alejarse de Alex y se sorprendió. ¿No le gustaba el chico? ¿No quería jugar? ... Daba igual, ya que al final había terminando acercándose ella y robándole un beso a su compañero. Suertudo, siempre le tocaban chicas que tomaban la iniciativa, aunque esta última era un poco extraña.

Bueno, comenzaría la segunda ronda... A ver que clase de parejas salían a continuación.

- ¡Comienza la segunda ronda! Si alguien quiere retirarse, que avise.

Giró dos veces la botella. La primera vez apuntó a Cathy, y la segunda vez a Daron.

Maldita botella, no hacía mucho que le habían robado un beso y le tocaba nuevamente. Vaya suerte o probabilidad o lo que fuera. Sintió los codazos de sus amigos, así que se levantó (¿Por qué las chicas no lo hacían?), y caminó hasta quedarse hincado frente a Cathy.
 
Se quedó ahí, esperando que la chica se lanzara a su cuello y lo besara.
 
-Eh…labios – se atrevió a decir la rubia cuando vio que él no le preguntaba.
 
Cierto, ella era de las tímidas, no tomaría la iniciativa. No pudo evitar sentirse un tanto idiota por eso, de hecho podía ver de reojo como sus amigos aguantaban la risa. Esos bastardos.
 
Bien, terminaría con eso de una vez. Cerró la distancia entre ambos pero tosco como él sólo, terminó chocando con el rostro de su compañera.
 
-Perdón –se disculpó, esperaba que la chica no tuviera un carácter horrible o vengativo escondido.
 
-No te preocupes –le respondió suavemente.

Les dedicó una mala mirada a sus amigos que se reían sin vergüenza (al menos Oda y Travis). Hecho eso se inclinó nuevamente hacia Cathy, dándole un beso suave. Terminada la acción regresó a su lugar.